Cuando hoy en día planeamos un viaje de más de unas horas de duración hay algoen nuestro equipaje que ocupa los primeros puestos de importancia para casi todo el mundo, los distintos cargadores. Y es que contando con que el móvil nos va a acompañar allá donde vayamos el cargador y por supuesto poder contar con una toma eléctrica donde conectarlo se convierte casi en una cuestión de vida o muerte. Pero esa misma dependencia del cargador y del punto de luz también se convierte en una cadena que nos ata a un lugar determinado ya que mientras nuestro dispositivo se recarga… lo máximo que nos podemos alejar de él lo marca el cable del cargador, lo que nos lleva a la imagen de esa persona que en el aeropuerto habla por el móvil en cuclillas pegado a la columna donde encontró el primer enchufe.
En un mundo sin cables quizás la última barrera sea precisamente la del cable del cargador y si se consigue eliminar, y me refiero a eliminarlo de verdad no a sustituir cada cargador por un adaptador que tenga que hacer contacto cuando dejamos el dispositivo sobre una plancha, ya no nos preocupará tanto el porqué no se avanza en el desarrollo de baterías más duraderas. Mientras, surgen distintas alternativas que intentan desde gestionar mejor el consumo de la batería hasta conseguir un cambio total en nuestra forma de cargar nuestros dispositivos.
SleepWell
La primera opción que me ha llamado la atención no es un método alternativo de carga sin cables sino un software de gestión de la batería relacionado con el uso del Wi-Fi en redes de acceso público. El punto de partida de este software es que cuando un dispositivo intenta conectarse a una red wi-fi pública el gasto de batería con la conexión wi-fi activada es mayor si el punto de acceso está compartido con más dispositivos.SleepWell lo que permite es que nuestro terminal entre en un modo de ahorro de batería mientras espera su turno de conexiónvolviendo a activarse cuando sea posible lo que permite optimizar la duración de la batería. No conseguirá que tu batería se recargue pero si eres un usuario intensivo de redes wi-fi agradecerás ese tiempo extra ganado.
Ainergy
Energía del aire, tal cual. Aquí si entramos ya en el apartado de formas de recarga “mágicos”. Ainergy es un adaptador que se conecta por (micro) USB a nuestros dispositivos y que permite capturar energía de la señal de las redes wi-fi.Presentado en el CES del 2010 este dispositivo permite que mientras estés conectado a una red wi-fi no sólo navegues sin cables sino que también recargues la batería sin cables.
Como podeis ver en este vídeo Ainergy no es en sí el cargador (éste es sólo un intermediario para cargar el dispositivo) sino en realidad la batería interna que es la que almacena la energía capturada de redes wi-fi por lo que como os podeis imaginar hay planes de futuro para desarrollar baterías adaptadas a cualquier dispositivo con esta capacidad de absorber energía sin cables.
Ainergy no es además el único desarrollo en este sentido ya que también tenemos a AirPower, una propuesta encaminada en la misma dirección.
Powercast y WiTricity
Por último (aunque hay muchas más propuestas) os dejamos conPowercast, una compañía que tienen en mente el sustituir la forma de transmitir electricidad como podeis comprobar en su canal deYoutube.Tal y como informan en CNN Money de la mano de Philips y con acuerdos firmados con más de 100 compañías Powercast está desarrollando una tecnología que permite la transmisión de electricidad sin cables, de forma que cualquier dispositivo que incluya a su vez su receptor se cargue siempre que se encuentre en el radio de la red eléctrica. De momento las limitaciones en este prometedor desarrollo son evidentes ya que la red eléctrica emitida no cubre más de 1 metro de distancia pero desde luego es un buen primer paso.
En el mismo sentido o incluso más allá llegan los esfuerzos de WiTricity, un proyecto del MIT que mediante campos magnéticos (generados por la resonancia de dos bobinas alineadas) parecidos a los que producen los transformadorespermite transmitir energía de forma inalámbrica y atravesando cualquier superficie que se interponga.
Las primeras pruebas demostraron como se puede transmitir electricidad con una efectividad del 45% a una bombilla de 60w usando dos bobinas de cobre situadas a 2 metros de distancia. Las implicaciones que podrían suponer la evolución de un proyecto así nos hace albergar esperanzas en un futuro totalmente libre de cables (eso si, lleno de señales electromagnéticas)